CONCLUSIONES

En todo el proceso de búsqueda de información sobre los diferentes tipos de enfermedades catalogadas como ‘Enfermedades de pobres’ y ‘Enfermedades de ricos’, se puede apreciar que la mayoría de estas no son como se refiere.

Las enfermedades del estereotipo de “Enfermedades de ricos’ son las que se producen por el ritmo de vida de una persona con la suficiente solvencia económica y algunas que se dan por herencia genética. En cambio, las enfermedades estereotipadas como ‘Enfermedades de pobres’ son las que se presentan por la carencia económica de ciertas personas. Estas se pueden presentar sólo en casos de pobreza, como es la desnutrición; sin embargo, en muchos casos las ‘Enfermedades de pobres’ también se presentan en personas con una situación económica favorable, pero en los pobres se aprecia un gran problema de desinformación en cuestión de prevención y curación.

Por lo dicho antes, las enfermedades de pobres que se presentan por este gran problema se desarrollan de tal manera que podrían causar pesares mayores y en algunos casos la muerte, pero por su situación económica es que estas enfermedades se desarrollan más en estas personas que en las que llamadas ‘ricas’, por ello se hacen los estereotipos de ‘Enfermedades de pobres’ y ‘Enfermedades de ricos’.

Según el caso presentado antes, se podría eliminar esta generalización o estereotipo de ‘Enfermedades de pobres’ y ‘Enfermedades de ricos’ con un poco más de información para las personas que la necesitan; así, las enfermedades podrán ser prevenidas y curadas sin diferencias de en que clase social se presentan.

Sin embargo, lo expuesto anteriormente no quiere decir que no hay diferencias entre las enfermedades que se presentan en ‘pobres y ricos’, ya que seria utópico pensar que personas con bajos recursos con tan sólo un poco más de información podrían prevenir las enfermedades que se presentan por su situación económica. Por ello, hay algunas enfermedades que sólo se dan en una ‘clase’ socioeconómica, como es la hemofilia y la desnutrición crónica.

Se logrará una equidad ante las enfermedades si también la hay ante el trato y la accesibilidad a los centros de salud, si tratos diferentes a personas que provienen de situaciones socioeconómicas distintas.